Clásicamente, y hace ya unas dos décadas, la cirugía con Laser Excimer para la miopía y astigmatismo era la única posibilidad existente, y era la técnica aplicada en quirófano para todos los pacientes,tuvieran estos una alta o baja graduación.

Esta técnica es la conocida como LASIK o queratomileusis in situ asistida por laser.Actualmente sigue vigente y es la técnica más usada,con un gran resultado y seguridad.Consiste en levantar un flap corneal con microqueratomo o con laser de femtosegundo, y ablacionar la cornea restante con laser Excimer.Exíste alguna variante como la técnica Relex smile, en la que no se produce el corte completo en los 360 grados, sino que se realiza intraestromal,pero el efecto es muy parecido.

El mecanismo de acción , es la evaporación de tejidos, originando un aplanamiento corneal y un adelgazamiento de la cornea, mayor a mayor numero de micras corneales haya que eliminar.Esto produce un cambio en la biomecánica corneal muy importante.
Tras unos primeros años ,se llegó a la conclusión de que había que dejar un remanente de cornea suficiente para que no se produjeran alteraciones importantes en el tiempo como las tan temidas ectasias corneales.
Se trata de una deformidad corneal que origina astigmatismo irregular y disminución de la agudeza visual,y ocurre porque se debilita demasiado la arquitectura corneal ,siendo esta inestable en el tiempo.
Poco a poco se fué reduciendo el número de pacientes con alta miopía para esta técnica, ya que una de las pruebas realizadas, es saber el grosor corneal de cada candidato, y si no supera el mínimo ,se contraindica.

Por eso,apareció una nueva técnica para ellos.Hoy en día se realiza en algunos pacientes a partir de 6 Dioptrías de miopía.
Se trata de lentes intraoculares precristalinianas llamadas ICL,y son implantadas si reducir el grosor corneal.
Esto evita las complicaciones anteriormente citadas.

Es necesario tener un espacio amplio en la cámara anterior del ojo,y/o no tener suficiente grosor corneal para la técnica LASIK.Se trata de un procedimiento realizado con anestesia tópica, y nunca se hace bilateralmente.
Siempre se hace un ojo previamente y a la semana normalmente el segundo para comprobar la correcta posición de la lente dentro del globo ocular.

La ventaja es la reversibilidad y la calidad visual conseguida, no habiendo algunos de los problemas con las luces nocturnas que si ocurren con el laser y no observandose disminución de sensibilidad al contraste.
Es muy importante,sin embargo, controlar la presión ocular postoperatoriamente,aunque las lentes vienen ya preparadas con un orificio central que favorece el paso del humor acuoso,evitando esta complicación y frenando en mayor medida la aparición de catarata precoz, más frecuente con las ICL antiguas, que no aparecian perforadas en el centro.